Uruguay: las joyas naturales de Rocha para ser descubiertas por los turistas TITULO
Ubicada a unos 300 kilómetros de Montevideo y a casi 30 de la frontera con Brasil, esta área costera-marina cuenta con una porción terrestre de casi 1.700 hectáreas.
La paleta de colores conformada por el azul, verde y blanco que ofrecen el océano, los montes y las arenas en el área protegida de Cerro Verde e Islas de la Coronilla, es una joya natural para que los turistas descubran en el departamento uruguayo de Rocha.
Ubicada a unos 300 kilómetros de Montevideo y a casi 30 de la frontera con Brasil, esta área costera-marina cuenta con una porción terrestre de casi 1.700 hectáreas.
La geografía incluye lomadas y planicies asociadas a dunas costeras, cañadas, puntas rocosas, playas arenosas y formaciones vegetales, como el matorral costero de Cerro Verde.
El arribo al lugar requiere de un espíritu aventurero para atravesar el camino que serpentea entre el bosque nativo, mitad tierra y la otra arena, situación que hace recomendable la utilización de vehículos todo terreno.
La llegada hasta un punto del que sale un ramillete de senderos marca el inicio del recorrido a pie, entre el monte y las playas.
La directora de Turismo de Rocha, Ana Caram, dijo a Télam que "desde arriba del cerro, más allá de lo paisajístico y lo que tiene las Islas de la Coronilla, se puede ver también la flora y la fauna del lugar, que es realmente maravillosa".
En Cerro Verde quedan claros los resquicios de la Mata Atlántica en Uruguay, que es una de las principales áreas de alimentación y desarrollo de la tortuga Verde, que está en peligro de extinción.
Además, la localidad, que pasó a formar parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas en el 2011, cuenta también con una porción marina de más de 7.000 hectáreas e incluye un complejo de islas oceánicas, como la Isla Verde, la más extensa y próxima a la costa, o la de la Coronilla.
"Esta área protegida tiene dos lugares emblemáticos, uno de ellos es Las Piedritas, que es el mejor pesquero de Rocha y fue el quinto del mundo en alguna oportunidad y que es un lugar donde se pescan hasta corvinas grandes de playa, pero que a su vez, tiene una playas increíbles", agregó Caram.
Considerada de "gran interés" para la conservación de la fauna y la flora del país, Cerro Verde e Islas de la Coronilla cuenta con especies vegetales endémicas y amenazadas y es hábitat de la ballena franca austral y del delfín franciscana, además de lobos marinos y aves migratorias como los chorlos, los gaviotines y los playeros.