Secuestraron tres perros y un loro hablador, víctimas de maltrato en una casa
Los animales se encontraban en mal estado, sobre todo los perros.
Con el último procedimiento por maltrato animal realizado en los últimos días por la Fundación Bio Animalis, ya son 17 los animales rescatados desde noviembre del año pasado hasta la actualidad, siendo la mayoría perros.
Este se realizó en una vivienda ubicada en el noreste de nuestra ciudad, donde vivían en muy malas condiciones y sin alimentos tres perros pequeños, que serían de raza caniche -no se pudo determinar debido al mal estado en que se encontraban- y un loro hablador cuya tenencia está prohibida por ser un animal silvestre.
Desde la entidad detallaron que la causa se encuadra por violación a la Ley de Maltrato y Crueldad Nº 14.346, por no alimentar en cantidad y calidad suficiente a los animales, causando sufrimientos innecesarios. También por violación de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies (Cites), por ser el loro hablador cuya tenencia como mascota está prohibida.
Gretel Monserrat, titular Bio Animalis, sostuvo que los canes secuestrados se encontraban en muy mal estado: "Estaban anémicos, delgados y con el pelo muy sucio, a tal punto que no se podía identificar bien su raza", contó.
Los perros fueron trasladados a un veterinario para su recuperación y posteriormente serán entregados a hogares de tránsito para ser adoptados de manera responsable.
Por otra parte, Monserrat advirtió que no está permitida la tenencia de animales silvestres e instó a la comunidad a tomar conciencia y no comprarlos.
"No se deben comprar estos animales(por el loro) porque aunque crean que están mejorando su calidad de vida, en realidad lo único que hacen es seguir fomentando indirectamente el tráfico ilegal de fauna. Lo que hay que hacer en esos casos es denunciar el lugar donde se están vendiendo", dijo.
Añadió que el procedimiento se logró gracias al compromiso invaluable de testigos y se realizó junto al personal policial de la División de Investigaciones de la Departamental San Justo.
El ave, por su parte, también fue revisado por el especialista veterinario y se entregó a Ernestina Saravia de Amad, para recuperarlo y devolverlo a su hábitat natural.
"El tráfico de fauna es terrible"
Monserrat manifestó su preocupación por el tráfico de fauna y el mascotismo, por el que muchas personas tienen en sus casas animales que son silvestres, autóctonos o exóticos.
"Estos animales no se pueden tener como mascotas, la tenencia y comercialización está prohibida, el tráfico de fauna es terrible. Los loros habladores son muy buscados porque tienen la capacidad de imitar la voz humana, son imitadores de los sonidos de la selva en realidad, pero cuando viven en un ambiente humano imitan los ruidos que escuchan y eso es lo que llama mucho la atención", afirmó.
Asimismo, la integrante de la Fundación aseguró que el animal "sufre porque no está en su hábitat natural y también puede transmitir enfermedades. Además, el problema está en el terrible daño que se hace a los ecosistemas cuando son sacados estos animales de su lugar porque rompen nidos, destruyen su hábitat para poder sacarlos y se produce un desequilibrio total, muchas vidas de los animalitos se pierden durante el traslado".
Finalmente recordó que Bio Animalis sigue velando por los derechos de todos los animales, no solamente los domésticos. "Vamos a intervenir siempre que constatemos una situación de violencia", remarcó.