Se viene la renovación
La selección argentina tiene en este momento varios jugadores nuevos, que distan de los que marcaron la agenda por muchos años: los históricos. Si son mejores o peores que los anteriores solo lo dirá el tiempo.
En reiteradas oportunidades escuchamos decir que la selección era un club de amigos. De los amigos de Messi. Qué entre el rosarino y Mascherano manejaban todo. Que no querían a Icardi, que los entrenadores estaban condicionados y otras tantas cosas más.
Pasó el Mundial de Rusia, el mal resultado dejó secuelas. Los "históricos" se fueron yendo. "Masche" y Biglia renunciaron, otros pidieron no estar en las convocatorias y algunos simplemente no fueron llamados. Claro está, la ausencia más sensible es la del "10", de quien nadie sabe el futuro. Se dice que se está tomando un descanso y que pronto va a volver. Ojalá.
Lo cierto es que llegó el tiempo de la renovación. Nombres nuevos y otros antes vetados tienen ahora su lugar. Icardi es quien parece ser la principal cara para los procesos que se vienen, pero acompañado de Dybala, Lautaro Martínez y Lo Celso, entre otros.
En este momento se ha dado un combo que hace que esto sea posible. El entrenador interino no tiene demasiados compromisos, más las renuncias y ausencias permiten que se puedan ver jugadores distintos a "los de siempre". Si son mejores o peores los dirá solo el tiempo.
Los que lleguen tendrán que aprovechar sus oportunidades. Por el momento competencias oficiales no hay. Se tendrán que conformar con estos amistosos. Hay jugadores que ya se han ganado un lugar, Tagliafico y Marcos Acuña, ya demostraron que pueden estar en cualquier convocatoria
Será tiempo también de mucho análisis. La palabra de moda es: proyecto. Se piden proyectos serios y consolidados, se promete desde AFA un proyecto a 10 años. Todos "espejos de colores". Lo que la gente quiere es ganar. No había un proyecto en 2014 y se llegó a la final del Mundial. Hay un proyecto en Alemania y en Rusia se volvió en primera ronda. Al fútbol lo va marcando el día a día. Si se puede tener una buena camada de jugadores, con títulos, nadie a va a pensar en la linda estructura.
Una etapa parece haber terminado y otra asoma. Material hay será cuestión de ensamblar las piezas, poder formar un buen equipo y en el futuro hablaremos de extrañar a los que no están, o simplemente dejarlos en el olvido.