Satisfacción de la familia Tampieri por la restauración del chalé la “Estrellita”
La nieta de Ricardo Tampieri (h) visitó el chalé de bulevar 9 de Julio que será parte de un proyecto inmobiliario. Además, el arquitecto que lo llevará adelante lo defendió ante las críticas hacia la construcción de una torre con departamentos detrás de la emblemática casa.
Nostalgia, emoción y satisfacción. María Alejandra Tampieri, nieta de Ricardo Tampieri (h), tuvo esos sentimientos ayer cuando recorrió cada espacio de la "Estrellita", el chalé céntrico que formó parte de su infancia y también de la historia de San Francisco cuando se convirtió en un centro de protesta en medio del Tampierazo, en la década del setenta. Este lugar, tal como anticipó este diario, será restaurado y formará parte de un proyecto inmobiliario.
Se trata de una construcción de dos pisos de la primera mitad de siglo XX, dando inicio su construcción en la década del 30. La vivienda permaneció durante más de dos décadas con sus puertas cerradas. Está ubicada en bulevar 9 de Julio al 1300 y detrás suyo se levantará una torre vidriada de 17 pisos. La empresa constructora será MSR y el emprendimiento -denominado Modena- será comercializado por la inmobiliaria Roberto Berardo.
María Alejandra está radicada actualmente en la ciudad de Córdoba, pero visitó nuestra ciudad para volver a recorrer el distinguido chalé que albergó a su familia y que ingresó a la historia de la ciudad al convertirse en un verdadero campo de batalla y epicentro del reclamo de los obreros de la fábrica de fideos de la que era propietaria su familia.
Recordó que el chalé era la casa de sus abuelos, lugar que visitó siendo muy pequeña pasando días y noches disfrutando de cada rincón.
"Que revaloricen todo esto me da mucha alegría, a mi familia también, esta casa era hermosa, estamos muy satisfechos", dijo emocionada.
Mientras entraba en cada dependencia, hoy afectadas por el paso del tiempo, aparecía un recuerdo que la emocionaba, como el del gran salón donde hacían las reuniones familiares y las fiestas de fin de año, con fuegos artificiales, además de los altillos donde jugaba con su hermano y sus primos.
"Es muy emocionante volver a recorrer esta casa. Tengo hermosos recuerdos, veníamos con mi hermano y mis primos a la casa de los abuelos a pasar el día y también nos quedábamos a dormir. Había mucho para jugar porque mis abuelos tenían animales, criaban conejos", recordó María Alejandra.
Las huellas del Tampierazo
El chalé fue escenario de la violenta manifestación durante el Tampierazo pero María Alejandra asegura que no tiene muchos recuerdos porque era muy chica. "Mi papá, mi abuelo y toda la familia sufrieron mucho la pérdida", afirmó.
Agregó que aunque la familia ya no es propietaria de la casa, ni del palacio, ni la fábrica, siempre se preocupa por cómo están. "Siempre estoy preocupada porque aunque ya no son de la familia nosotros vivimos muchas cosas lindas, también feas, en esos lugares", remarcó.
Finalmente agradeció a todos los que participan en este emprendimiento que permite poner en valor un lugar que para ella fue uno de sus hogares.
Rescatar el patrimonio
"Estamos rescatando este patrimonio de San Francisco", aseguró el arquitecto y proyectista Gabriel Redolfi, de la ciudad de Rosario, titular de MSR Constructora que llevará adelante el emprendimiento a través de un fideicomiso.
El arquitecto definió a la aprobación del proyecto como "muy valiosa" porque fue analizado, articulado y llevado adelante a través de un trabajo en conjunto entre todos los actores.
Al ser consultado sobre algunas críticas, de los mismos profesionales de la arquitectura, respecto a que detrás suyo se construirá una torre con departamentos, Redolfi respondió: "La restauración no puede hacerse si no hay un emprendimiento económico que la avale, nosotros diseñamos este proyecto, los propietarios accedieron, les gustó la idea y cuando lo presentamos en la municipalidad fueron diez intensos meses de trabajo y estudio en donde el expediente recorrió las distintas áreas municipales hasta que se hizo la reunión en la que participaron todos los actores y de esa manera se le dio visto bueno. Actualmente el proyecto está en la etapa de visación previa", resumió el arquitecto.
Remarcó que para el diseño, que fue trabajado y analizado profundamente, se estudiaron ejemplos nacionales e internacionales. "Esto por supuesto puede ser contradictorio, polémico como muchas veces sucede con estas cosas, pero lo que es importante es que no estamos pasando una topadora y haciendo un edificio, acá se mantiene el protagonismo de la casa", dijo Redolfi.
El arquitecto destacó que en el proyecto se tomó la "posición de mayor humildad respecto a la casa. El edificio mismo es un bloque muy neutro, no tiene grandes expresiones para que no compita en nada con la casa, visto desde la calle, hay algunos ángulos donde el edificio casi no se ve. Por ejemplo, las cocheras del edificio estarán ubicadas en el mismo lugar donde se guardaban los autos anteriormente, la idea es que tenga un frente verde", señaló.
"Tuvimos el apoyo por parte de los distintos sectores que componen la comunidad porque realmente era una casa que estaba destinada a venirse abajo por el paso del tiempo", finalizó Redolfi.