Robos en el cementerio: el municipio reforzará la seguridad con empleados que harán vigilancia
Mientras desde la justicia investigan quiénes son las personas que compran piezas de bronce robadas, la municipalidad busca proteger el predio de la necrópolis local. En pocas semanas estiman "habrá personal dedicado solo a recorrer el lugar durante todo el día y en contacto con la Policía". Por ahora, no habrá cámaras.
La noticia no deja de llamar la atención, a plena luz del día y sin ningún tapujo los delincuentes se llevaban escondidos en sus bolsas placas, floreros y otros ornamentos metálicos del cementerio. Poco tiempo después y metros más adelante, la Policía los detuvo y la investigación está en marcha.
El camino de la compra de bronce con elementos que han sido visiblemente robados es motivo de una investigación judicial que tiene a cargo la fiscal Silvana Quaglia y con la que prometen ir "hasta las últimas consecuencias" para saber quiénes mueven este mercado ilegal.
Detrás del hecho, y la investigación de la justicia, en paralelo el municipio también tomará medidas. La Secretaría de Servicios Públicos, a cargo Ricardo De León, está trabajando en el refuerzo del sistema de seguridad en el cementerio municipal para que estos hechos no se vuelvan una costumbre.
En
el cementerio, las condiciones de seguridad serán reforzadas por medio de
rondas de control que harán los empleados municipales
Hay que resaltar que la necrópolis local tiene un predio de 7 hectáreas, divididos a través de la Av. 9 de Septiembre en dos. Así se encuentra la comúnmente llamada "parte nueva" que tiene 4 y las restantes están cercadas por los muros en la "parte vieja". Ahí, en esos nichos y mausoleos aun el bronce sigue estando presente aunque cada vez menos, y es motivo para que los "amigos de lo ajeno" vulneren la paz de los fallecidos y causen daños para sus familiares.
Consciente de los daños que pueden producirse, pero también impulsados por los costos económicos y un visible cambio de época, las familias optan por materiales alternativos para colocar en las lápidas y mausoleos.
"Actuaron sin impunidad"
Los acontecimientos sucedidos en la semana sorprendieron a todos. Esta vez los delincuentes actuaron de día e ingresaron al predio del cementerio como cualquier visitante, aunque en las bolsas se llevaran bronce y el esfuerzo de las familias.
Si bien no es la primera vez que ocurre, no deja de llamar la atención que haya sido a plena luz del día, esto obligó al municipio a trabajar en un plan rápido para que los hechos no sigan sucediendo.
"Antes esto sucedía durante la noche, acá han sido a plena luz del día con todo el personal trabajando y sin ningún tipo de impunidad", detalló el secretario de Servicios Públicos a LA VOZ DE SAN JUSTO.
De León dijo también que "el espacio más afectado por los daños ocasionados y los robos es la parte vieja" que cuenta con paredes alrededor, dado que allí "es donde hay mayor cantidad de elementos de bronce porque ahora la gente opta por otras cosas".
Para el municipio no quedan dudas que "los robos se producen para llevarse el bronce y venderlo en un mercado ilegal" por lo que consideraron desde el área que "debe investigarse a fondo quienes son las personas que compran este material aun cuando es robado".
Nuevo sistema
Las 7 hectáreas que tiene el predio del cementerio significan una gran superficie para cubrir. Actualmente el lugar no cuenta con seguridad privada, y según explicó el funcionario, "no contratarán tampoco" sino que se trabajará con otro sistema, y tampoco tiene cámaras de seguridad.
Cabe destacar que actualmente el municipio tiene a dos empleados administrativos en el cementerio trabajando, y otros 14 trabajan en el mantenimiento del predio. Ninguno está abocado a la vigilancia pero en breve la situación cambiará. "Con nuestra propia gente vamos a reforzar la seguridad en un sistema interno, además van a estar en contacto permanente con la Policía por cualquier inconveniente", indicó De León quien continuó diciendo: "Vamos a reunirnos con las autoridades de la Departamental San Justo para que se refuercen los recorridos nocturnos a modo de rondines en la noche".
El funcionario municipal también sostuvo que "es muy probable que se incremente la cantidad de empleados que trabajen allí" para poder llevar adelante las rondas de seguridad, por lo cual requerirán capacitación y coordinar cuáles serán las tareas de vigilancia.
Dada esta situación, calculó que "aproximadamente a fines de mayo" el sistema de refuerzo de seguridad interna comenzaría a ponerse en funcionamiento. Esto es así porque "de inmediato no pueden desplazarse a los empleados de mantenimiento dado que están haciendo otras tareas importantes de refacción en estos momentos".
Ante la consulta sobre si en algún momento se pensó en instalar un sistema de vigilancia con cámaras De León lo descartó de plano por el momento.
"No está previsto en lo inmediato pero seguramente en un futuro, con un plan de organización y análisis de seguridad por el tamaño del predio se puedan instalar cámaras", estimó el secretario.
Antecedente
Aprovechando la soledad del sitio, entre tumbas y panteones, el objetivo de robar materiales que puedan ser revendidos no es nuevo en San Francisco y hace una década había obligado a la municipalidad a contratar un servicio privado de vigilancia.
En 2006, personal armado y acompañado por perros realizaba rondas por el perímetro externo y por el interior del cementerio.
Se buscan alternativas al bronce
Más cerca en el tiempo, las personas comenzaron a optar por otros materiales para hacer lápidas. En parte por los robos y también por los costos. "El arte funerario en sí está muriendo lentamente. Hoy trabajando con bronce, de cada 10 lápidas que hacemos 2 solo pueden tener este material", dijo Ariel Muratore, de Memorial Arte Funerario, que lleva varios años en el oficio.
Según detalló el aluminio y "las chapas" son las opciones actuales que seducen a la gente al momento de elegir, aunque también las placas porcenalizadas que se pueden imprimir y el color principalmente también aparecieron con fuerza en este mercado.
El bronce se usa cada vez menos y es reemplazado por el vidrio, aluminio, la porcelana que permiten imprimir con color
"Los materiales alternativos le sacan mucha ventaja al bronce, y la gente más joven busca darle un aspecto menos funerario. Son otras épocas antes no ibas a ver color en las lápidas pero hoy la gente opta por eso", subrayó Muratore.
En su negocio se pueden ver dos placas listas donde el aluminio predomina, mientras que en las paredes a modo de ejemplo se ven las nuevas tendencias. "La confección de placas con los nuevos materiales demora pocos días. Cuando se trata de cerámica, se imprime sobre ella y ahora aun es más barato hacerlo sobre la chapa que no se rompe y es económico, además que puede llevar color", señaló.
Solo por poner un ejemplo, Muratore estimó que cuando son placas de bronce "el precio arranca en $4.500, mientras que los materiales con base de chapa cuestan como mínimo la mitad". Además, aclaró que "muchas familias optan para el caso de los mausoleos por colocar placas hechas en vidrio".
De esta forma, el bronce va quedando de lado, "por su costo, tiempos para que se funda y pueda elaborar la pieza" y ahora también por los robos.