Quinotos, la base del nuevo emprendimiento en el Merendero La Amistad
La producción llevará sabores diferentes a las mesas de la gente y a los integrantes de este espacio social les permitirá obtener más ingresos para sostenerse. También venden lo producido en la huerta y precisamente son sus colaboradores los que tienen a cargo este proyecto.
Una de las características fundamentales de la pequeña comunidad del Merendero La Amistad de la ciudad de Frontera es que siempre logra reinventarse para no solo dar alimentos sino también obtener ingresos económicos a través de diferentes emprendimientos.
En el predio de calle 100 al 900 muchas son las personas que se acercan a colaborar entregando donaciones y haciendo pequeños pero valorables aportes. Sin embargo, esta vez el emprendimiento es otro y se vincula con la producción de mermelada para vender y dividir ganancias un poco para el merendero y otro tanto para Eduardo Bach que es quien la mantiene.
En el último tiempo, Eduardo sumó a una compañera que trabaja con él en la huerta de La Amistad, Betiana Sandez, con quien idearon la forma en que todas las partes obtuvieran su rédito y se reforzaran los lazos comunitarios que cimientan este espacio social.
"Betty" como la conocen en el merendero contó cómo se presentó esta oportunidad: "A otro compañero que está trabajando en la huerta, Eduardo, le acercaron la posibilidad de usar la producción de un árbol de otro vecino que está cargado de quinotos. Entonces pensamos en aprovecharlos".
Eduardo y Betiana se convirtieron en "compañeros" de huerta poco tiempo atrás cuando ella comenzó a colaborar en el pasado mes de mayo, dado que el merendero nunca dejó de estar abierto y se ajustaron a las disposiciones sanitarias. Cuando comenzó la etapa de Distanciamiento Social ella se acercó.
La producción de la huerta también está lista para venderse (Archivo)
Para todos
Al ser una institución social y con impronta comunitaria, La Amistad con cada nuevo proyecto busca entretejer lazos donde las ganancias por pocas o muchas que sean puedan ser aprovechadas por todos, por eso, Sandez dijo que "en este pequeño proyecto hay varios sentidos que se mezclan".
La trabajadora social sostuvo que, en primer lugar, "tiene que ver con reconocer el capital humano invertido en la huerta donde Eduardo trabaja sin ningún fin de lucro". Además, en ocasiones la producción de la huerta es derivada al merendero fomentándose así el intercambio entre las funciones de cada uno.
"Hay un intercambio todo el tiempo que no se refleja en los ingresos económicos que él pueda percibir. Entonces lo pensamos en ese sentido de producir mermelada y que la circulación de esa ganancia sea compartida -indicó -. Siempre reivindicando los intercambios comunitarios con el merendero".
Ella se refirió a este espacio ubicado en lo profundo de Frontera como "el espacio donde todos se encuentran" y agregó: "En esta oportunidad es con la elaboración de mermeladas, pero hay otros intercambios comunitarios que son redes sociales (referiéndose al hacer, no a la tecnología) que hacen de sostén para muchas familias".
Emprendedores por excelencia
El proyecto anunciado por el Merendero La Amistad se basa en la elaboración y venta de mermeladas de quinotos, así como también la comercialización de la propia fruta.
A cargo de este trabajo están Betiana Sandez y Eduardo Bach que trabajan codo a codo en la huerta. Ambos destinan gran parte de su tiempo para colaborar en el merendero ayudando, en este caso, con la producción al espacio.
La mermelada o en almíbar se vende el kilo a $150 y el medio kilo a $80. Además, los quinotos como fruta se comercializan a $50 el kilo también. Los encargos son enviados a domicilio en cualquiera de los dos casos.
El encargo es directo con los huerteros a sus teléfonos:3564 58-3649 (Betiana) y3564 37-9239 (Eduardo). Asimismo, con ellos también se pueden comunicar para comprar lechuga, achicoria o rúcula de la quinta donde Sandez contó que "tienen mucha producción" y ya se preparan para la próxima siembra.
Cabe destacar que el Merendero La Amistad está ubicado en calle 100 al 950 en la ciudad de Frontera y recibe donaciones de otros alimentos para preparar las viandas destinadas a familias que sino no podrían llevar nada a su mesa.