Piden quince años de cárcel para ex músico de Trulalá
Es por extorsionar a mujeres jóvenes con imágenes íntimas.
La Fiscalía pidió 15 años de prisión durante el juicio a un ex músico del grupo musical cordobés Trulalá acusado de extorsionar mujeres a las que les exigía fotos íntimas, entre otros delitos sexuales.
Se trata del ex tecladista Fanco Carignano, de 27 años, a quien se le adjudica coacción calificada a través de redes sociales en contra de mujeres, con las que habría cometido además los delitos de "abusos sexuales gravemente ultrajantes y promoción a la corrupción de menores".
En ese plano se le adjudican ocho hechos con igual cantidad de víctimas, cuatro de ellas menores de edad.
De acuerdo con la investigación realizada, el músico, entre los años 2009 y 2016, entabló amistad con jóvenes y adolescentes, a las que les solicitó que se tomaran fotos en ropa interior.
A partir de ese momento, siempre de acuerdo con la instrucción del caso que se juzga en un juicio a puertas cerradas, el músico exigía a las jóvenes, bajo amenaza de publicar sus imágenes en redes sociales, que grabaran videos desnudas y con poses sensuales.
La situación se prolongaba en el tiempo y algunas de las víctimas incorporaban a su rutina la situación de tener que responder en forma cotidiana con las grabaciones.
Según consta en el expediente, algunas de las "esclavas" llegaban a desobedecer y el músico, que siempre utilizaba perfiles falsos, llegó a cumplir su promesa de humillarlas en redes sociales.
En el juicio una de las víctimas dijo que le preguntó al extorsionador "qué ganaba" con lo que hacía y el músico reveló que gozaba con observar mujeres, especialmente cuando las obligaba a actuar de determinada manera.
También se supo que una de las víctimas había sido novia del abusador sin saber que era él quien la acosaba y la chica contó que el músico de forma impasible cómo ella le contaba las cosas que su "amigo virtual" la obligaba a hacer.
Los fiscales Gustavo Dalma e Ingrid Vago acusaron al músico de extorsión, abuso sexual, producción de imágenes pornográficas y promoción a la corrupción de menores, entre otros delitos.
El juicio a puertas cerradas se desarrolla en la Cámara 8ª del Crimen, con el juez unipersonal Juan Manuel Ugarte y la acusación del fiscal Hugo Antolín Almirón.