Murió Hugh Hefner, fundador de Playboy y referente de la revolución sexual
La noticia se confirmó a través de un comunicado oficial. Con su compañía cambió la forma de pensar (y mirar) el sexo en la sociedad nortamericana.
Mientras estuvo vivo, Hefner dijo que uno de sus grandes deseos era dormir el sueño eterno al lado de Marilyn Monroe y se compró una tumba contigua. Hace algunas horas se empezó a cumplir ese último anhelo del hombre que con su revista cambió la forma de pensar el sexo en la sociedad norteamericana, fundó un imperio y creó un personaje -él mismo- admirado y vilipendiado en dosis parejas, una metáfora muchas veces caricaturesca del erotismo.
De todo tipo de excentricidades se fue moldeando la leyenda de Hefner, un hombre que comenzó a inventarse a sí mismo en 1953, cuando creó con la ayuda de unos amigos una publicación que demolió el puritanismo de gran parte de la sociedad estadounidense con una propuesta descarada: el sexo puede ser divertido, a los hombres les gusta ver mujeres desnudas y la masculinidad es más que caza o pesca.
La revista fue un éxito y Hefner se internó en ese laberinto del que nunca pudo evadirse: la fama. Lo hizo con una premisa ya escrita por el genial Oscar Wilde un siglo atrás: "Sólo hay algo en la vida peor que ser crucificado: ser ignorado".