Modo vacaciones: hasta $250 por día para dejar la mascota en una guardería
En nuestra ciudad, las opciones son varias, desde veterinarias a cargo de médicos hasta espacios manejados por adiestradores profesionales.
En vacaciones cada vez son más los dueños de mascotas que eligen dejarlas al resguardo de profesionales. El día de alojamiento puede llegar a costar $250 y las familias no dudan en incluir este monto dentro de los gastos de verano.
En nuestra ciudad, las opciones son varias, desde veterinarias a cargo de médicos hasta espacios manejados por adiestradores profesionales.
En el caso de las veterinarias, ofrecen colchonetas y platos para la comida y el agua personalizados; otros espacios abiertos como una casa y los que son al aire libre cuentan con caniles individuales para cada animal.
Exigencias
Para poder acceder tanto a guarderías veterinarias como espacios de cuidado privado, las exigencias son las mismas pero se deben cumplir a rajatabla. "Es necesario presentar la libreta de vacunación completa más la antirrábica y que tenga colocada una pipeta para las pulgas", explicó la veterinaria Pamela Hvozda.
Todos los lugares piden que los dueños lleven la comida de la mascota, ya que cada animal tiene su dieta personalizada y además aclaran que esta es una forma de no estresarlo de más al estar lejos de su casa y su familia. "Lo importante es que el animal coma su comida para no sufrir ningún tipo de malestar durante la estadía y no estresarlo más de lo que está", explicó el adiestrador canino Ángelo Cornaglia.
Más consultas
El promedio de días en que se quedan las mascotas al resguardo en estos lugares va de 7 a 10 y, según indicaron los entrevistados, los dueños no tienen problemas en pagar lo que sea necesario con tal de que su amigo de cuatro patas esté tan bien como en su casa.
"Lo curioso a años anteriores es que cada vez más familias de clase media eligen la modalidad de la guardería. Antes preferían dejar el animal en su casa y que alguien de confianza lo vaya a ver, lo alimente o lo pasee; o directamente lo dejaban de un familiar. Hoy prefieren gastar pero dejarlos en un lugar acondicionado para ellos porque la mascota se convirtió en un integrante más de la familia y quieren lo mejor; desde un lugar ambientado para que se divierta hasta un servicio de peluquería", comentó Cornaglia.
Otros eligen llevarlos de viajes
Claro que otros prefieren que su mascota también los acompañe en el viaje. Y aquí hay que tener una serie de cuestiones en cuenta. A la hora de trasladar un perro, gato o cualquier otro animal en el auto por la provincia de Córdoba, la Ley Provincial de Tránsito de Córdoba (Nº 8.560) indica que es posible hacerlo con dos elementos. Uno es el arnés conocido también como el "cinturón de seguridad para perros" y la otra los caniles, que son jaulas al estilo de las cajas que se utilizan en el aeropuerto para traslado de mascotas.
Los cinturones de seguridad para mascota pueden costar entre $100 y $200 de acuerdo al tamaño o la calidad. En el caso de las cajas trasportadoras, su precio es más elevado y van desde los $2.000 a los $6.000.
"El animal es un ocupante del vehículo y no puede ir en brazos, sin importar su tamaño", explicó Hvozda.
Tampoco se puede llevar animales en jaulas externas que superen o excedan el tamaño original del vehículo.
Requisitos para viajar por la Argentina y el exterior
Para trasladar perros y gatos por la Argentina, es requisito hacerlo con certificado de vacunación antirrábica; certificado de salud y aptitud para el traslado (en especial por vía aérea); y cumplir, eventualmente, con exigencias propias de transportes terrestres y aéreos según cada empresa.
Los que salgan del país con sus mascotas por vía acuática, aérea o terrestre deben presentar a las autoridades sanitarias de destino el certificado veterinario internacional que acredite su sanidad.
Este papel es expedido por el Senasa y es un requisito indispensable para que las autoridades del país de destino autoricen el ingreso del animal. Además, debe contar con su libreta de vacunación completa y certificado de buena salud por parte del veterinario que lo atiende.