Los terneros hablan: observar su comportamiento, clave para detectar problemas
Especialistas aseguran que conocer el comportamiento del ternero en la crianza y aprender a leer las señales que nos envían "permite detectar problemas de manera anticipada, para realizar las correcciones a tiempo y con el menor costo".
Como en todo sistema de producción, la "prevención" es el pilar fundamental para lograr los objetivos de manera eficiente, "siempre es más barato prevenir que curar". Por ello es clave observar el comportamiento diario de los animales, lo que nos permitirá detectar problemas a tiempo y así poder actuar en consecuencia.
Así lo asegura un informe difundido por el médico veterinario Daniel Manelli, especialista en manejo de guacheras y el ingeniero agrónomo Alejandro Centeno, jefe de Inta AER San Francisco.
Según expresaron los especialistas, "los animales se comunican entre sí naturalmente, a través de diferentes maneras: sonidos, movimientos o la falta de ellos y es esa comunicación la que les permite generar vínculos que desde pequeños los ayudan a conseguir alimento y protección, asegurando su propia supervivencia".
Por otro lado, "la constante modificación en los sistemas de producción hace que las condiciones naturales se vean continuamente alteradas y es la intensificación en la producción animal la causa más importante de modificación de su medio ambiente natural", manifestaron.
"Esos cambios en el hábitat, generan tensiones, estrés y cambios de conducta frente a sus propios compañeros como hacia nosotros mismos", continuaron.
En este sentido, los especialistas aseguraron que "es interesante prestar atención a esas expresiones porque es el modo que tienen de decirnos que algo no está bien, que no está cómodo, que están alteradas las condiciones normales para expresar su potencial genético".
Asimismo aclararon que estas manifestaciones pueden ser individuales o grupales, evidenciando enfermedades, mal trato, miedo, entre otras.
"Una
rápida observación del comportamiento de los terneros, indica, en primer lugar,
si las condiciones son adecuadas o existe algún factor de estrés que esté
afectando la crianza".
Comportamiento del recién nacido
Una vez terminado el parto, la vaca se levanta y comienza el lamido de su cría, este comportamiento tiene como objetivo, estimular al ternero a su nueva forma de vida (fin de la vida intrauterina), ayuda a secarlo y favorece a circulación de sangre para que el ternero entre en calor. A los pocos minutos el ternero (normal) ya tiene intenciones de pararse, cuando lo logra es instintivo buscar la ubre para alimentarse.
Luego y en la primera semana, la vida del ternero transcurre básicamente en dos actividades durante el día, alimentarse mamando alrededor de unas 5/6 veces y permanecer echado (como ocultándose) o acompañando a su madre en traslados cortos.
En un sistema de crianza artificial
"Independientemente del sistema de crianza que realicemos, estamos cambiando totalmente sus condiciones", remarcaron. "Pasamos de una forma de vida en donde se alimenta varias veces al día, está prácticamente siempre echado y oculto (de los depredadores naturales), a condiciones de total exposición, a veces con movilidad limitada, no puede elegir ´su lugar´, no siempre se alimenta cuando lo desea y no tiene la protección de su madre", indicaron Manelli y Centeno.
Estas condiciones de producción (alojamiento, alimentación, trato), hacen que el ternero se encuentre en una situación de estrés casi permanente y lo "obliguen" a tener que adaptarse rápidamente; "es en estas circunstancias en donde nosotros somos los ´responsables´ de ofrecerle dentro del sistema de producción establecido, las mejores condiciones para lograr el estado de ´confort´ que el ternero requiere para lograr una crianza exitosa", manifestaron.
En sistemas individuales
En los sistemas de crianza realizados en estaca o jaula, al llegar a la crianza la simple observación del comportamiento ya nos indica si los animales se encuentran en condiciones de confort. "Vamos a ver terneros echados, otros que ´juegan´ o ´corren´ alrededor de la estaca y la mayoría que ante pequeños estímulos prestan atención (cabeza levantada, orejas erectas) o se levantan", puntualizaron los profesionales.
En sistemas colectivos
Por otra parte, los especialistas recordaron que en los sistemas colectivos además existen manifestaciones de socialización entre los terneros. "De esta manera en el corral, deberíamos observar un grupo que come o toma agua, otro que está echado, algunos deambulan por el corral, se lamen, juegan entre sí o se disputan por la comida, etc".
"Cuando el ternero demora en incorporarse o no presta atención ante la presencia del hombre, seguramente tiene algún proceso en marcha que deprime su capacidad de respuesta".
¿Que nos dicen con su conducta?
El informe señala además que una rápida observación del comportamiento de los terneros, indica, en primer lugar,si las condiciones son adecuadas o existe algún factor de estrés que esté afectando la crianza.
"Hacer una lectura del comportamiento nos ayuda a determinar rápidamente las situaciones que debemos modificar", aseguran.
A continuación, algunos ejemplos que pueden servir de guía al momento de observar un sistema de crianza.
Una lectura de su conducta, nos ayuda a determinar si existe algún
factor de estrés
- Animales temerosos o
inquietos: muchas veces la sola presencia de
perros (sobre todo de gran porte), hace que el ternero se encuentre nervioso o
inquieto, esta razón es porque socialmente el perro es un animal de caza y el
ternero, busca defenderse de una posible agresión. También en algunas ocasiones
esta situación se da con el mal trato que reciben los terneros a diario por
parte del responsable de su crianza (golpes, desenrollarlos a los tirones,
gritos etc.).
- Animales deprimidos: un ternero sano y bien alimentado, ante cualquier estimulo (la llegada de varias personas juntas, o desconocidas, acercarse con vehículos extraños para ellos), se levanta rápidamente, cuando el ternero demora en incorporarse o no presta atención ante la presencia del hombre, seguramente tiene algún proceso en marcha que deprime su capacidad de respuesta (diarrea, estrés calórico, estrés por frío, enfermedad).
- Animales mansos: hay establecimientos, en donde la mansedumbre es de tal magnitud, que los terneros se acercan y reciben al hombre; incluso esta mansedumbre se traslada hasta el animal adulto. Estas situaciones ante pequeños cambios de conducta permiten detectar problemas de salud en forma inmediata.
- Animales sedientos: es muy común el suministro de agua a una hora determinada del
día, pero al acercarnos vemos que están sedientos. Esto nos está diciendo que
necesitan agua extra (ya sean por el consumo de alimento seco o la temperatura
del día); interpretar estas manifestaciones hacen que el suministro de agua no
siempre se tiene que ajustar a un esquema, sino adecuarlos según las propias
necesidades del ternero.
- Mayoría de terneros balando o inquietos: por lo general son expresiones de hambre, puede ser por cambios en el horario de alimentación, falta de alimento balanceado, falta de agua, etc.
- Mayoría de terneros echados: puede ser por estrés por frío, procesos generalizados de enfermedades (diarreas, neumonías, etc.)
-Terneros echados y "enroscados": en los casos extremos de estrés por frío, el ternero busca generar calor a través de temblores y disminuir su pérdida a través de estar echado acurrucado.
- Terneros estirados en el suelo o jadeando: son situaciones de estrés por calor, con una frecuencia respiratoria muy alta, respiración incluso abdominal.