El monte que sana y alimenta
El monte nativo es una fuente valiosa de alimento y una gran farmacia natural. Algarrobo, chañar, quebracho blanco, cina cina, tala, tusca, diente de león, ortiga, tusca, mburucuyá o pasionaria, entre otras, crecen en predio del Archivo Gráfico y Museo Histórico de San Francisco. La importancia del cuidado de la naturaleza, fuente de la vida.
Por Isabel Fernández
En el predio del Archivo Gráfico y Museo Histórico de San Francisco (AGM), crece desde hace unos años y a partir de ahora comenzará a extenderse, un monte nativo. En una extensión de 900 metros cuadrados, se convierte en una fuente valiosa de alimento y una gran farmacia natural ya que muchas plantas tienen propiedades medicinales.
En el lugar, entre árboles y yuyos, se pueden encontrar especies autóctonas como algarrobo, chañar, quebracho blanco, cina cina, tala, tusca, diente de león, ortiga, tusca, mburucuyá o pasionaria, entre otras plantas autóctonas que atraen además a la fauna silvestre y aves de distintas variedades.
En nuestro monte nativo, predomina el algarrobo, un árbol muy generoso ya que no solo es fuente de bebidas espirituosas y refrescantes como la aloja o añapa, sino también de alimentos como la harina de algarroba, además de infusiones.
Cuando el AGM comenzó tiempo atrás el proyecto del monte didáctico, el objetivo era recrear el paisaje tal y como era antes de la llegada de los primeros inmigrantes, pero en cada recorrida y trabajo en el lugar estudiantes y vecinos fueron redescubriendo el importante valor de los montes nativos, que lamentablemente han sido extraídos en la provincia y el país por la necesidad del cultivo.
El monte se extenderá a través del nuevo proyecto del invernadero y vivero didáctico que tiene el objetivo de preservar y desarrollar plantas autóctonas y también para que alumnos de escuelas primarias aprendan a obtener especies nativas que luego se implantarían en plazas. El nuevo emprendimiento mide 7,20 metros de largo por 3 de ancho, en breve será cubierto y podrá utilizarse.
María Teresa Milani y Alberto Orellano, integrantes del Archivo Gráfico destacaron en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO que el monte "no solamente brinda sombra o leña, sino también alimento y medicina. Los pueblos originarios principalmente y los inmigrantes se valían del monte para poder sobrevivir".
"Cada yuyo o planta tiene propiedades medicinales y para la alimentación -aseguró por su parte Milani-. Como estamos dentro de la región del espinal, el algarrobo es el rey entre todos. Le dicen el árbol que te da de comer en el camino porque tiene la chaucha que es la algarroba que molida o no, sirve para alimentarse. Se puede fabricar harina, bebidas, arrope, panes salados y dulces, patay, etc.".
"Por eso cuando nos vienen a visitar los estudiantes les ofrecemos masitas o budines hechos con harina de algarroba para que entiendan que sirve para muchas cosas y crear conciencia de que éste árbol y otros tienen propiedades para darnos medicina y alimentos", añadió.
Comentó que entre las plantas que se encuentran en el monte nativo "el diente de león por ejemplo tiene hierro, incluso más que la espinaca; otro yuyo que tiene más propiedades que la espinaca es la ortiga, que si se corta y se deja reposar no pica y se puede consumir. Los inmigrantes cuando llegaron a nuestra zona buscaban las ortigas del campo para alimentarse porque sabían que tenía hierro".
"También el mburucuyá o pasionaria es utilizada como sedante, los capullos de pasionaria tienen propiedades sedantes, no así la raíz que es venenosa. Muchas raíces como la del espinillo sirven para lograr tinturas naturales", añadió.
Cuidar la naturaleza
En tanto Alberto Orellano recordó que muchos remedios "están basados en las plantas de los montes, en la naturaleza. Es fundamental el cuidado de la naturaleza que nos brinda todos los recursos".
Al mismo tiempo advirtió que en la provincia de Córdoba "queda solamente un 2% de montes nativos naturales que se fueron sacando ante la necesidad de los cultivos y también el paso del ferrocarril no solo para tender las redes, sino que también talaban los árboles para utilizar la leña para el tren cuando faltaba el carbón en la época de la segunda guerra Mundial".
"Hace años que se viene abusando del monte, al principio fue por una cuestión de necesidad pero después se descontroló. Ahora con el tema del cultivo de soja se ha desmontado mucho no solamente en Córdoba sino en todo el país", añadió al respecto Milani.
Un proceso muy largo
Por otra parte Orellano dijo que actualmente se ve que hay "una vuelta a los montes nativos pero lo que no saben es que no se pueden regenerar de un día para el otro, es un proceso muy largo. En nuestro pequeño monte tenemos muchos animales y aves que llegan a buscar alimento y agua".
"Para los pueblos originarios perder su hábitat en estos montes significó mucho, perdieron su relación con el monte no solamente por no vivir en él sino también del alimento natural que les brindaba", finalizó.
Los frutos del monte. Muchas semillas se utilizan para elaborar alimentos o para sanar algunas dolencias
Las plantas del monte en los remedios
homeopáticos
Algunas de las plantas del monte nativo
se utilizan como materia prima para la elaboración de algunos
remedios homeopáticos elaborados a partir de vegetales.
El médico y homeópata, Daniel Cento (MP-24118; CE-166), integrante del Colegio de Médicos Homeópatas aseguró en diálogo que el diente de león, la ortiga o el chañar son plantas autóctonas que se utilizan como base para los medicamentos en homeopatía.
Explicó que con el diente de león "se elabora un remedio homeopático denominado Taraxacum, que tiene acción en la depuración hepática, lográndose buenos resultados en algunos tipos de cefaleas y dolores reumáticos, siempre y cuando correspondan los síntomas del paciente con los de su patogenesia del remedio".
Agregó que ésta planta "también es utilizada en fitoterapia con fines depurativos e incluso mucha gente la utiliza como alimento agregando las hojas a las ensaladas, también se hacen infusiones".
Ortiga para ¿la urticaria?
Por otro lado, Cento agregó que con la ortiga se elabora el Urtica urens, remedio homeopático ideal para tratar varios tipos de urticaria. "Parece contradictorio, pero justamente el mismo tipo de afección que puede producir la planta, al transformarla en remedio homeopático, logra curar esa misma afección y también otras similares". Recordó que las semillas y frutas del chañar, que son comestibles, se valoran como alimento humano y animal. Los frutos se utilizan muy comúnmente tanto para fines culinarios y medicinales en forma procesada de arrope. Extremadamente dulce, oscuro y espeso, es muy similar a la miel.
"Es conocido localmente para aliviar el dolor de garganta y la tos. Las propiedades medicinales de la fruta del chañar han sido comprobadas científicamente como cuatro: antitusivo, expectorante, analgésico y antiinflamatorio. Siendo ésta última afectada por el calor cuando se consume en su forma cocida (arrope)", detalló Cento.
La tusca en fitoterapia
Respecto a la tusca o "acacia aroma", dijo que si bien no es utilizada en homeopatía, sí es utilizada en fitoterapia y en nutrición. Centro explicó que en los estudios realizados sobre esta planta, "se destaca su capacidad antiinflamatoria, lo que la convierte en una buena alternativa para los dolores musculares y articulares, pero sin los efectos secundarios que tienen las drogas químicas. Las propiedades más importantes provienen de su gran capacidad de depuración".
"Es ideal para acompañar dietas desintoxicantes o ayunos cortos. Gran depurativo y desintoxicante de la sangre. Ayuda a eliminar el ácido úrico y tiene actividad diurética. También es utilizada en algunos casos de gastritis. En dietética se la utiliza en forma de infusión "té de Tusca'", recordó. Agregó que la tusca posee comprobada actividad contra diversos tipos de bacterias, es febrífuga, hace bajar la presión sanguínea, antidiarreica y antiséptica intestinal y de vejiga. En uso externo, tiene comprobada actividad como antiinflamatorio, astringente, cicatrizante y para casos de sarna y úlceras en animales".
Con qué se elaboran estos remedios
Cento aseguró que un medicamento homeopático se puede elaborar con cualquier sustancia, orgánica o inorgánica que exista en el universo, ya sea de origen vegetal, animal, mineral o incluso sintético como en ciertos casos en que se utilizan ciertas drogas de la medicina convencional.
"La diferencia es que estas sustancias se utilizan solo como materia prima; en el proceso de elaboración son sometidas a infinidad de diluciones y dinamizaciones que hacen desaparecer las partículas químicas y conservar solo la esencia electromagnética de la sustancia original. Actualmente hay más de 1000 remedios homeopáticos elaborados a partir de vegetales y nuestra región podemos encontrar muchos de ellos", detalló el homeópata. Finalmente recordó que los remedios homeopáticos "son elaborados en laboratorios homeopáticos, por farmacéuticos homeopáticos, siguiendo las reglas de farmacopeas internacionales igual que los medicamentos fitoterápicos. En herboristerías o dietéticas se pueden encontrar preparados que contienen menos cantidad de principios activos, catalogados como suplemento nutricional y son de venta libre", dijo.
Los múltiples beneficios del fruto del algarrobo
La algarroba, fruto del algarrobo, tiene muchos beneficios. Como carece de gluten es apta para personas celíacas y además es muy rico en en fibras, carbohidratos, proteínas, calcio, hierro, magnesio, zinc, potasio, selenio, vitaminas del complejo B, vitamina A, y también es pobre en grasas.
Se puede encontrar en distintas formas: hecha harina -muy utilizada para elaborar budines, masitas, bizcochuelos, el tradicional patay un pan hecho con la harina y agua, alfajores, postres y golosinas- también como sustituto del cacao o chocolate en desayunos o meriendas, con la ventaja que carece de sus efectos estimulantes. La harina de algarroba es una base para la cocina de muchas comunidades originarias.
La licenciada en Nutrición de nuestra ciudad, Marisa Maranzana (MP-2420) afirmó que generalmente se la recomienda "en estados de debilidad y cansancio, en personas con exigencias físicas y mentales, deportistas, ayuda a prevenir la anemia, a fortalecer los huesos y dientes por su contenido en calcio. Es perfectamente apropiada para todas las edades, tanto para niños en edad de crecimiento, hasta en adultos mayores".
Destacó que el consumo regular de harina de algarroba, "mejora el ritmo intestinal, gracias a su alto contenido en fibras. Por otro lado, encontramos el café de algarroba, con su sutil aroma y exquisito sabor, en donde se lo utiliza en reemplazo del café. Ésta bebida es perfectamente indicada en personas que padecen gastritis, e hipertensos, ya que no contiene cafeína".
"También encontramos el arrope de algarroba, producto totalmente artesanal, el cual se obtiene a partir de la cocción del jugo del fruto, sin agregado de azúcar, hasta convertirse en una mermelada", finalizó Maranzana.
Budín de algarroba
Una receta para disfrutar
A continuación la receta para preparar bizcochuelo de algarroba:
Ingredientes:
* 1 taza de harina de algarroba
* 2 tazas de harina leudante
* 5 cdas. soperas de aceite
* 1 cdita. de polvo de hornear
* 1 taza de azúcar integral mascabo
* 3 huevos
* Esencia de vainilla
* Cantidad necesaria de leche
Preparación: Batir los huevos y azúcar hasta obtener una mezcla espumosa, luego agregar lentamente las harinas, esencia de vainilla, polvo de hornear y aceite, por ultimo ir agregando la cantidad necesaria de leche, hasta obtener una masa a punto letra. Por otro lado, enmantecar y enharinar la fuente. Verter el contenido, y llevar a horno a mediano durante 40 minutos.
Un arbol generoso, el algarrobo brinda sombra y alimento
Un árbol con leyenda
Esto sucedió hace mucho tiempo, en la época en que los españoles comenzaron las conquistas de estas tierras de América.
Un día, los indios Comechingones, muy asustados, vieron que unos hombres de piel blanca, cargados de armas, avanzaban sobre ellos. Venciendo su temor, los hombres del cacique comechingón Ipachi Naguán, lucharon contra los hombres blancos.
La lucha fue larga, y el hambre y el cansancio fueron debilitando a los comechingones.
Ipachi Naguán, entonces, decidió guiar a su pueblo hacia un monte de algarrobo y allí pidió a los dioses que protegieran a las mujeres y niños.
En un momento todo pareció perdido, pero entonces sucedió lo inesperado. Las ramas de los algarrobos, comenzaron a sacudirse y desde las alturas cayó una lluvia de frutos que se abrieron y dejaron ver sus semillas.
Esas algarrobas fueron el mejor alimento para los indígenas, que comieron hasta hartarse. Se sintieron con más fuerzas, volvieron a la batalla y vencieron a los españoles.
El fruto del algarrobo, había salvado a los habitantes de esta tierra.