Ayer maestras y alumnos, hoy amigos de la vida
Dos emotivas historias de una amistad que nació en la escuela y se mantiene con el paso de los años: . una de ellas, la de María Elisa "Ñata" Uriburu y José Luis Mazzurco, y la otra, la de Rosa Ana "Toti" Carissio y sus exalumnos de la Escuela Nuñez.
Fueron maestras y alumnos, pero el recorrido de la vida los transformó en amigos. La escuela fue el lugar en el que se conocieron y los años, el pretexto para reunirse y fortalecer un vínculo que se fortaleció con el paso del tiempo.
LA VOZ DE SAN JUSTO fue testigo del vínculo que mantienen dos docentes de nuestra ciudad, María Elisa "Ñata" Uriburu y Rosa Ana "Toti" Carissio, con quienes fueron sus exalumnos.
Ambas iniciaron su camino en la docencia a los 18 años y hasta el día de hoy, son recordadas por los alumnos que pasaron por sus clases. Ellos reconocen sus valores y destacan la labor que por años ejercieron frente al pizarrón y marcó su aprendizaje, y hasta celebran sus cumpleaños.
Tanto Uriburu como Carissio, consultadas por este diario, se mostraron sumamente emocionadas y orgullosas por el cariño de sus exalumnos. "Algo se habrá hecho bien para que pasen los años y nos sigan saludando y acompañando", dijeron esbozando una sonrisa.
María Elisa "Ñata" Uriburu y José Luis Mazzurco, una vida de enseñanzas
"La considero una hermana"
María Elisa "Ñata" Uriburu y José Luis Mazzurco, exmaestra y exalumno, ella de 90 y él de 80 años, se conocieron en la Escuela Yrigoyen y luego, por razones laborales, siempre permanecieron en contacto.
Los años asentaron una amistad que Mazzurco resume en lazos de familia: "La considero una hermana", asegura.
"Hasta el día de hoy me sigo cruzando a exalumnos en la calle que me saludan y me recuerdan. A veces me detiene una persona y me recuerda que fui su maestra. No he cambiado mucho, ni siquiera de peinado", cuenta Uriburu.
Acerca de su rol como docente, señaló: "Me siento orgullosa de los 32 años en los que dicté clases. Reconozco que era muy exigente pero jamás traté mal a un niño". "No hacía falta que nos retara, con una mirada ya bastaba", rememoró Mazzurco.
La exdocente manifestó que "siempre les decía a mis alumnos que estudiaran. Que era por la satisfacción de sus padres y por su bien". Y no pierde de vista la situación actual de la educación, "mucha gente me dice que los alumnos de ahora son diferentes a los de antes y no los aguantaría. Yo siempre respondo que sí, porque nunca tuve problemas a la hora de enseñar".
Los años pasaron y se consolidó un vínculo amistoso entre ambos. "Para mí no solo es mi exmaestra sino que es una amiga. He venido muchas veces a su casa por el trabajo, en este momento siento que la quiero como si fuera mi hermana", dijo Mazzurco.
"Se forjó una hermosa amistad", cerró "Ñata".
"Toti" y sus alumnos de la Escuela Rafael Nuñez, que le celebraron su cumpleaños 88
Le celebraron el cumpleaños
Rosa Ana "Toti" Carissio fue maestra de primaria durante 30 años, 25 de ellos en la Escuela Rafael Núñez. El martes último, los alumnos de uno de los cursos que más añora le celebraron su cumpleaños número 88.
Todo comenzó tres años atrás cuando los integrantes de aquel curso, hoy tienen entre 67 y 69 años, comenzaron a contactarse para reunirse, algo que no solamente lograron sino que sostienen mensualmente. El primer encuentro, para el Día del Maestro en la casa de "Toti".
En esta oportunidad, en la casa de Silvia Susana Díaz, se reunieron y festejaron entre anécdotas y recuerdos. Es que Carissio fue su maestra en segundo, cuarto y sexto grado. "Es la única referente que nos queda, por eso tenemos que aprovecharla. Para ella, estos encuentros son una inyección anímica", contaron a LA VOZ DE SAN JUSTO.
Visiblemente emocionada, "Toti" manifestó que "esto (por la celebración del cumpleaños) es un regalo de Dios. No todos los alumnos recuerdan a su maestra como estos chicos. Estoy feliz, tranquila y halagada. Pienso que algo hice bien, si todavía me recuerdan. Si tendría que nacer de nuevo, sería maestra".
Buenos muchachos
Consultada acerca de si algunos de los exalumnos presentes se portaba mal, entre risas, confesó que "solo había algunos que eran más inquietos que otros, pero se portaban bien".
También recordó que "en las horas libres llevaba los chicos a mi casa para prepararlos y ayudarlos; que pasaran de grado era mi objetivo máximo".
De la celebración participaron los compañeros Silvia Susana Díaz, Rodolfo Bazán, Julio Bovo, Américo Butignol, Omar Ferrero, María Angélica Ghione, Roberto Gioino, Marilú Monina, Eduardo Pignatta, María Rosa Primo, Elides Rochia y Nilda Viotti. Por problemas personales no pudieron asistit José Alberto Arbones, Norma Cavalini y Adriana Ogando.