Trabajadores de la sanidad pararán este viernes
"Nunca hemos trabajado tanto y cobrado tan poco. Nadie puede mirar para otro lado, la salud está en el centro de la escena", alegaron desde el gremio.
Los trabajadores de la sanidad anunciaron un plan de lucha nacional por la recomposición de los salarios. Las medidas de fuerza concluirán el viernes, con un paro de tres horas en cada turno "en todos los establecimientos asistenciales del país", en medio de la pandemia del coronavirus, aunque se aclaró que "las urgencias serán atendidas".
Será para resolver una paritaria pendiente desde hace ocho meses. Los gremios agrupados en la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad (Fatsa) anunciaron las medidas de fuerza que comenzarán el jueves con asambleas en los lugares de trabajo y el viernes continuará con paros por turnos.
Fatsa agrupa a personal de clínicas, sanatorios, hospitales y laboratorios de análisis clínicos, entre otros establecimientos.
La secretaria general de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (Atsa) seccional San Francisco, Gabriel Sidler, ratificó la medida de fuerza a nivel nacional coincidiendo por completo con los argumentos que llevaron a aplicar esta protesta.
Entre otras cosas, Sidler indicó a LA VOZ DE SAN JUSTO que "nosotros teníamos una cláusula de revisión como consecuencia de la inflación de 2020 y las cámaras empresarias han negado sistemáticamente el pago de la misma para poder llegar a un acuerdo".
Pese a las quejas de las cámaras empresariales de la salud señalando el impacto causado por la pandemia, la dirigente gremial recordó que durante 2020 "las empresas recibieron mucha ayuda, a través de mecanismo como el ATP y el Repro para el pago de sueldos, además de no pagar contribuciones y recibir múltiples exenciones impositivas y sin embargo están trabajando a full".
Con todo esto, dijo que "la argumentación que hacen las cámaras carece toda validez" ya que en este caso "pretenden lograr beneficios a costa de los trabajadores y no lo vamos a permitir".
Al aludir a las condiciones actuales de trabajo no dudó en asegurar que "el personal de salud está saturado" y además "atravesando por una gran incertidumbre" debido a que "a la falta de recomposición salarial se le suma el esfuerzo por la pandemia" que torna "muy difícil" atender los compromisos cuando "del otro lado no se ve ningún tipo de apoyo hacia nuestra tarea".
"Las urgencias se atenderán"
En declaraciones a la prensa, el secretario general de la CGT y adjunto de Fatsa, Héctor Daer, descartó que los trabajadores de la Sanidad estén actuando con "irresponsabilidad".
"Mediante el plan de lucha no estamos cometiendo ninguna irresponsabilidad. Las urgencias se atenderán", afirmó el referente sindical quien precisó que "todo lo que está programado estará paralizado, ya sean estudios o intervenciones quirúrgicas".
Asimismo, recordó que el conflicto no es de ahora, sino que "se conversa desde julio del año pasado" y explicó que "es un paritaria que sigue abierta" y sin resolución.
Al ser consultado sobre cómo incidirá la medida de fuerza, Daer respondió que "atención medica hay porque existe el sistema público de salud".
Y agregó: "Hay que tener en claro que somos trabajadores que fueron a trabajar y muchos se contagiaron Covid, mientras que otros ya no están porque fallecieron en su función laboral".
Sobre el reclamo en el contexto de la gravedad epidemiológica, aseguró: "Esto amerita que ni siquiera estemos hablando de un aumento, sino de una recomposición salarial".
En un comunicado, el gremio subrayó: "Nunca hemos trabajado tanto y cobrado tan poco. Nadie puede mirar para otro lado, la salud está en el centro de la escena y todos se deben comprometer con la solución: los empresarios, los financiadores del Sistema, los responsables políticos de cada área de gobierno y los gobiernos provinciales".
"Nuestros salarios han perdido dramáticamente el poder de compra. Hemos llegado al límite de la tolerancia. Se han agotado todos los plazos", completa el texto difundido por los gremios de la salud.
Las medidas sindicales se adoptan luego de que fracasaran las negociaciones paritarias, en el marco de las cuales los gremialistas pidieron un aumento del 16% a partir del mes de abril, algo que fue rechazado por las autoridades de la Federación Argentina de Prestadores de Salud (Faps).
Daer insistió en que "el plan de lucha es ante el fracaso en las paritarias" y se quejó: "Venimos conversando con empresarios y con el Estado y la verdad es que no podemos recomponer el salario. No hay prácticamente negociación: nosotros vamos y pedimos la diferencia del costo de vida del año pasado y nos responden que no hay un peso para pagarlo".
"Fuimos al Ministerio de Trabajo y no hubo posibilidades ni siquiera de negociar. En una reunión de delegados del gremio decidimos avanzar con asambleas en día jueves y hacer un paro de tres horas el viernes. Si no encontramos salida, el martes tendremos un paro de 24 horas. Los trabajadores de sanidad pusieron todo", concluyó.